El pequeño gran artista, Henri de Toulouse Lautrec

Hace cuatro días visité el París bohemio, caminando por Montmartre observaba aquellas tiendas de souvenirs que están repletas de láminas de los pintores que representan esta gran ciudad, París. Entre ellas pude reconocer numerosos carteles de Toulouse Lautrec.

En sus obras uno puede encontrarse con sus pinceladas rápidas, la influencia del japonismo en sus dibujos, su estilo fotográfico (con encuadres y espontaneidad) y también sus grandes áreas de color.
Un día como hoy hace 150 años nacía este artista. Nadie como él supo representar el París bohemio de finales del siglo XIX, una vida llena de excesos, cafés, teatros, cabarets...



A él nunca le terminó de seducir el Impresionismo porque le interesaba centrarse en las figuras humanas, la vida nocturna, los bailes, las actuaciones y en las clases vulgares (los marginados de Montmartre). También era un apasionado de las estampas japonesas, lo que hace que esto sea significativo en su obra. Pero sin dudad lo que le hicieron conocido fueron sus carteles publicitarios y litografías.


Para tener en cuenta el trabajo de este artista que cumple hoy 150 años, Viena exhibirá numerosas obras nunca antes vistas en Austria cedidas por importantes museos como el Museo Toulouse-Lautrec de Albi, el Metropolitan de Nueva York o el Orsay de París entre otros. Titulada El camino hacia el expresionismo, esta cita con Toulouse Lautrec se mantendrá hasta el 25 de enero.

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